Invirtió US$ 40.000 en el que será su primer local fuera de Montevideo; desembarca junto al proyecto de decoración Martinika Deco

Unos 10 años, y una pandemia de por medio, fue lo que le tomó a Ximena Torres dar el paso y llevar La Dulcería, su emprendimiento gastronómico, fuera de Montevideo. El destino elegido fue ManantialesMaldonado.

«Desde que armé La Dulcería hace 10 años siempre la imaginé como una marca que pudiera trascender los barrios, los departamentos, los países, porque creo en lo universal del placer gastronómico», explicó Torres.

La apertura será dentro de dos semanas y se transformará en la tercera tienda de la marca (además de Pocitos Punta Carretas). Más precisamente, es una mudanza del local que tenía en el Mercado Agrícola de Montevideo (MAM).

Este desembarco se hace en conjunto con el proyecto de decoración Martinika Deco. De hecho, su directora Martina R. Dugonjic, es parte co responsable del diseño de la nueva casa de La Dulcería, reveló Torres.

El nuevo local insumió una inversión cercana a los US$ 40.000, además de varias horas de trabajo por parte de la empresaria, quien asegura que cuida mucho cada detalle de su emprendimiento.

Por ello, una vez puesta en marcha la tienda, si bien contará con un equipo de 10 personas, Torres planea viajar dos veces por semana para hacer un seguimiento más cercano.

El local, ubicado en el kilómetro 163,5 de la Ruta 10, ocupará unos 60 metros cuadrados (m2), que incluyen el espacio cerrado y una «gran pérgola al aire libre» ubicada al frente, sobre la ruta con vista el mar.

En cuanto a la capacidad locativa del nuevo espacio, como deberá respetar los aforos permitidos por la «nueva normalidad», explicó que ofrecerá lugar para unas 40 personas, entre las áreas interiores y exteriores.

En tanto, su propuesta gastronómica será muy amplia pensada para todo público, desde los niños, pasando por alguien que va a trabajar con su laptop, hasta personas más grandes que van a tomar el té con amigos o familia», indicó Torres.

Atracción natural

La elección de Manantiales como primer destino fuera de Montevideo no es casual. Según explicó la empresaria, para la decisión tuvo en cuenta dos variables: por un lado, el hecho de que hay mucha gente que se ha mudado a esa zona del país a vivir y, por otro, que era una demanda que recibía de su público todos los veranos. «Siempre sucedía que venían a comprar mis productos para llevarse a su casa para las vacaciones».

Según comentó, el puntapié inicial se dio cuando Martinika decidió mudarse de La Barra (Maldonado) a Manantiales «viendo ese éxodo». Como Torres trabaja con su fundadora «hace años», decidió seguirle los pasos y armar un local al lado. De hecho tendrán una conexión para poder «retroalimentarse». «La Dulcería está pensada con foco en la comida como un acto de placer, pero también como acto estético, que conviva con el arte de Martinika. Apuntamos a un lugar donde pasen cosas y por ello organizaremos diferentes cursos y eventos a lo largo del año. Es un lugar de intercambio, porque el hábito del consumidor cambió», definió.

Para ello, la propuesta permanecerá abierta todos los días del año en un amplio horario de 8:30 a 20:30. El plan, explicó la empresaria, es aprovechar el fuerte de la marca que es el desayuno, pero al mismo tiempo ofrecer almuerzos livianos, té y, con la llegada de «un clima más lindo» se podrá «disfrutar de un lindo sunset».

De todas formas, todo dependerá de la respuesta del público que, en definitiva, «es el que nos marcará el rumbo, porque es la tienda la que se adapta al lugar», concluyó Torres.

FUENTE: https://www-elpais-com-uy.cdn.ampproject.org/c/s/www.elpais.com.uy/amp/el-empresario/xime-torres-lleva-dulceria-manantiales-prepara-franquicias.html